Nosotros te llamamos ContactoZona PrivadaPrecios
Glosario

Bullionismo

por Software DELSOL

El Bullonismo es una primera versión del mercantilismo (de hecho se le conoce como mercantilismo español o mercantilismo arcaico) que fue puesto en práctica por los reyes españoles de la casa de Habsburgo durante los siglos XVI y XVII y sus sucesores en la primera mitad del XVIII.

El mercantilismo

Recordemos que el sistema mercantilista fue el sistema monetario y económico puesto en práctica por los reyes absolutistas de la Edad Moderna Europea que basa la riqueza en la posesión de metales preciosos (oro y plata) y sigue políticas proteccionistas de la producción nacional de bienes y servicios con el objeto de fomentar el consumo de productos del propio territorio y sus exportaciones y, a la vez, dificultar las importaciones de fuera del territorio para conseguir la mayor cantidad de dinero (oro y plata) para el propio reino.

El mercantilismo evolucionó siguiendo otras versiones como el colbertismo francés que fue adoptado (y adaptado) también por los ingleses.

Como acabamos de decir, en este sistema la riqueza está representada únicamente por metales preciosos (oro y plata) por lo que el dinero que circula debe ser de dichos metales o, si se emite papel moneda, debe estar directamente respaldado por depósitos de oro o plata y poder se canjeado por tales metales en cualquier momento, lo que debe garantizar el banco emisor de ese papel moneda, de modo que llega a aparecer aquí el dinero fiduciario.

Contexto histórico

Los Reyes Españoles de la casa de Austria siguieron estos modelos económicos dado el hecho de que en sus posesiones americanas se producían grandes cantidades de oro y, sobre todo, de plata que eran acuñados en monedas y transportados a Europa en dos expediciones anuales (además de otros envíos de metales preciosos que venían de contrabando sin la intervención de la corona), lo que supuso la entrada de grandes cantidades de estos metales en España y, a través de ella, en Europa (la Corona Española cobraba un 20% del metal precioso que entraba por Sevilla). También se incrementó la producción de estos metales en los territorios de los emperadores Habsburgo de Austria. Esto supuso la aparición de dos monedas de plata que fueron los referentes monetarios durante toda la Edad Moderna: el Tablero austriaco y, sobre todo, el Real de a Ocho castellano.

La inflación

Los teóricos del sistema bullonista pretendían con él eliminar la inflación: al consistir la riqueza en metales preciosos no varía, según ellos, el valor de la moneda utilizada.

Sin embargo esto no fue así porque el valor del oro y la plata también varía según factores como su disponibilidad. De hecho en la Sevilla de la Edad Moderna el problema de la inflación llegó a ser una auténtica pesadilla, subiendo los precios de manera astronómica dada la entrada masiva de metales preciosos.

Los envíos desde el Nuevo Mundo a Europa supusieron un incremento enorme de la cantidad de oro (181 toneladas en 150 años a lo que habría que sumar lo que entró por contrabando) y, principalmente, de plata (16.886 toneladas en 150 años) de la que se había dispuesto hasta ese momento por lo que, existiendo mucha más cantidad, el funcionamiento normal del mercado hace que su valor baje por lo que, al utilizar estos metales como moneda de cambio, se produce una enorme inflación que es lo que sucedió en la Edad Moderna en toda Europa y, especialmente, en España.

Sin embargo, no todo fue negativo, esa entrada masiva de oro y plata permitió la creación de riqueza en forma de aparición de actividades fabriles e industriales así como el comercio y aumentó, en cierta medida, el bienestar de la población. Además permitió a los monarcas españoles mantener una política hegemónica, convirtiendo a España en el primer imperio global de la historia.

La moneda bullonista

Como hemos dicho, toda la moneda en este tipo de política económica debe ser directamente de oro o plata o, si es papel moneda, estar directamente representado por estos metales.

En esta época se facilita la acuñación de moneda (según ya hemos descrito) así como la emisión de papel moneda como dinero fiduciario.

Este bimetalismo siguió existiendo hasta 1816 que en España se estableció el oro como único patrón monetario.

El patrón oro ha seguido existiendo hasta los años 70 del pasado Siglo XX en que ha sido sustituido por el Dinero Fiat.

Las políticas económicas del bullonismo

Como hemos visto en este artículo, el bullonismo solo considera riqueza económica la posesión de metales preciosos, por lo que toda la política económica del país se va a centrar en conseguir tener la mayor cantidad posible de estos metales.

Está claro que tiene más oro y plata el que consigue recibir estos metales en mayores cantidades y, a la vez, no gastarlos o entregarlos al exterior.

Por ello toda nación mercantilista es proteccionista, fomenta la producción interior y el consumo de productos nacionales intentando evitar la importación de bienes y servicios y fomentar la exportación de manera que entre riqueza pero no salga.

Aquí encontramos la gran diferencia entre el bullonismo, como mercantilismo arcaico, respecto de otras versiones del mercantilismo como el colbertismo: el Imperio Español disponía, como hemos visto más arriba, de producción propia de metales preciosos en grandes cantidades por lo que tenía estos metales de manera normal (y también, a menor escala, sucedía lo mismo en la zona Austriaca que producía oro y plata), por el contrario países como Francia o Inglaterra no tenían estos insumos de metales preciosos por lo que debían buscar el desarrollo económico e industrial para aumentar su producción y el desarrollo financiero para conseguir entradas de oro y plata. Probablemente esta segunda versión del mercantilismo tenga mucho que ver con la aparición del capitalismo y de la Revolución Industrial.

¿Necesitas un programa que te ayude a gestionar tu negocio?

En TeamSystem | Software DELSOL llevamos ya más de 30 años creando todas las herramientas que necesitas para escalar tu negocio sin complicaciones.