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Grupos focales en usabilidad: Ventajas y desventajas

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10 de enero de 2022

En una estrategia de posicionamiento, las investigaciones de mercado son un punto crucial para cualquier organización: es indispensable obtener retroalimentación sobre nuevos productos o servicios, y para ello se utilizan los grupos focales. Sin embargo, no siempre es sencillo establecer la misma metodología para recabar datos sobre la usabilidad de un programa o sistema.

¿Qué son los grupos focales?

En un contexto de investigaciones de mercado, la técnica de investigación de grupos focales sirve para realizar acopios de datos valiéndose de la interacción entre varias personas, para explorar cómo piensa y se comporta el público objetivo.

Mediante los grupos focales, se pretende extraer información subjetiva de los sujetos participantes en el estudio para ayudar a conseguir algunas metas, como comprender mejor cómo llegar al público o cómo depurar el producto: es una forma de anticiparse a las percepciones del público objetivo.

Cada grupo focal consta de una serie de personas que han tenido que ser seleccionadas siguiendo cuidadosos criterios, habitualmente determinados por la segmentación deseada: rango de edad, estatus social, poder adquisitivo, raza, género, formación académica…

Durante una sesión de grupo focal, debería existir una figura que modere la reunión: entretanto, el resto de los participantes debatirán, expondrán sus puntos de vista, argumentarán, se dejarán llevar o expresarán su descontento con el tema de la sesión.

El moderador recopilará todos los datos posibles de la sesión: quién ha respondido qué, cuáles han sido los argumentos a favor o en contra, qué opinión ha sido la más extendida, o cuáles han sido las primeras impresiones de los integrantes del grupo focal.

Pasos para poner en marcha una investigación de grupos focales

  1. Definir el tema de la investigación. Se recomienda analizar un solo aspecto en cada sesión de grupo focal para ganar en precisión y que los datos no se diluyan.
  2. Seleccionar las preguntas. Conviene no ceñir todas las respuestas a “sí” y “no”, sino dejar espacio abierto a valoraciones subjetivas.
  3. Designar a un moderador. La figura del moderador puede ser alguien de la propia empresa, o alguien seleccionado del grupo focal a tal efecto.
  4. Reclutar a los participantes. Se puede hacer mediante una convocatoria por redes sociales, y ofreciendo algún incentivo por participar en el estudio.
  5. Obtener su consentimiento expreso. Infórmales en detalle del objeto de la investigación y de sus pautas, para que puedan rubricar su participación con pleno consentimiento.
  6. Iniciar el proceso de investigación. Fomenta la participación de los miembros del grupo focal exhortándoles a presentarse y a abandonar el anonimato.

¿Qué es la usabilidad?

La usabilidad se define como la facilidad de uso de un objeto creado por el ser humano: puede ser desde un programa informático o una página web hasta un pequeño electrodoméstico o cualquier herramienta. En realidad, es un estudio sobre la interfaz o experiencia de usuario (UX).

Tipos de usabilidad

La usabilidad puede dividirse en dos grandes tipos: empírica y relativa.

  • La usabilidad empírica se basa en datos 100 % objetivos: sus resultados se obtienen mediante un trabajo de campo, pruebas reales y mediciones concretas. Arrojan datos precisos y desprovistos de subjetividad.
  • La usabilidad relativa se basa en las comparaciones de los resultados con los esperados, o con los de otros sistemas similares: no son resultados buenos o malos en sí mismos, salvo que salgan mejor o peor parados en sus comparativas.

Ventajas y desventajas de los grupos focales en usabilidad

Ventajas

El empleo de grupos focales para determinar la usabilidad de un sistema, programa o sitio web, se utiliza para conocer de primera mano si la experiencia de usuario que se ha diseñado realmente cumplirá con su propósito.

Atendiendo a la clasificación anterior, la técnica de grupos focales arrojará unos datos muy valiosos en tanto en cuanto nuestro objetivo sea recabar percepciones subjetivas de los participantes.

El diseño de esta investigación es realmente flexible y dinámico: se obtienen datos muy valiosos sobre la psicología del consumidor, y el intercambio de pareceres durante la sesión puede ser realmente constructivo para ayudarnos a definir una experiencia de usuario.

Desventajas

Sin embargo, esta dinámica no resultará muy efectiva si lo que pretendemos es obtener datos precisos para medir cuantitativamente una experiencia de usuario (siempre que veamos una UX como algo cualitativo, y no cuantitativo).

Además, hay que tener en cuenta que en todo grupo humano se pueden dar distintos roles, y cada individuo podría no expresar al cien por cien su punto de vista por encontrarse demasiado influenciado por el grupo.

No hay que olvidar que el coste de realizar un estudio por grupos focales puede ser muy elevado, y la influencia del moderador podría condicionar los resultados.

Aplicar la técnica de grupos focales para analizar la usabilidad de un programa o sitio web nos puede ayudar a comprender mejor cómo se siente el usuario y cómo de fácil le resulta interactuar con el sistema: no obstante, si las preguntas no están bien definidas, los datos obtenidos podrían servir de poco.